Por: Eduardo Salgado, Abogado, especialista en Derecho Comercial, magíster en Derecho con énfasis en Derecho Mercantil y Contratación y LL.M en Derecho, The Pennsylvania State University. Profesor Facultad de Derecho de la UTB.
Ser abogado y hablar de Derechos Humanos es hablar del mundo, de profesiones amenazadas, de minorías en vulnerabilidad, pero también de relaciones internacionales. Los Derechos Humanos están en todos los niveles de la sociedad, luego, sus afrontas también se encuentran en todos los niveles llámese culturales, sociales, políticos, económicos o ambientales.
La situación en temas de Derechos Humanos a nivel mundial es desafiante, pues los debates en los sistemas democráticos se están presentando con mucha frecuencia y también hay episodios de represión a ciertos derechos que ya se han elevado a esta categoría.
El tema se torna más complejo cuando vemos los reclamos desde muchos sectores de la sociedad en varios países y en Colombia. Aquí, el sistema legal y sobre todo el sistema judicial constitucional hace una labor en pro del respeto a los derechos constitucionales, sin embargo, son las personas en entornos de poder que a veces intentan fácticamente con vías de hecho sutiles, y no tan sutiles, esquivar la protección de los derechos humanos.
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Es importante reconocer la actualidad en torno a los Derechos Humanos, especialmente en días en los que se exalta la labor de los abogados en el mundo, pues en principio, el fin universal de esta apasionante profesión es velar por la protección y respeto de los mismos.
La situación actual implica que los abogados también estén en constante actualización en el manejo de plataformas tecnológicas, pues es notable la utilidad de estos medios para la eficiencia general del sistema judicial. Los procesos, durante la pandemia, migraron a lo remoto, y esto ha sido regulado por el Consejo Superior de la Judicatura, lo que los obliga a trabajar como litigantes, académicos y consultores, en una nueva realidad.
¿Por qué vale la pena ser abogado?
Se pueden enumerar algunas razones por las que vale la pena estudiar derecho y ser abogado, aunque en realidad son muchas.
- Son los guardianes de los Derechos, reglas y de la norma de normas: la Constitución.
- Los abogados son los precursores de las teorías que mejoran la protección de los derechos en todas las dimensiones.
- Son los jueces que deciden y resuelven los conflictos de todos los agentes que existen en la sociedad.
- Son los defensores de los indefensos.
- Son el pilar epistemológico de las leyes.
- Están capacitados y autorizados para perseguir a los que no hacen el bien e imponer sanciones y castigos.
- Como profesión liberal, pueden ser litigantes, contralores, procuradores, fiscales, profesores, consultores, asesores, jueces, magistrados, políticos, etc.
La formación de un profesional en Derecho debe ser de calidad, esta debe estar diseñada bajo un modelo de excelencia como lo hace la Universidad Tecnológica de Bolívar – UTB. Los profesionales preparados en la Facultad de Derecho de la UTB adquieren competencias orales, escriturales, investigativas y humanísticas como ninguna otra facultad a nivel regional, me atrevo a decir.
La UTB cuenta con procesos académicos rigurosos que siempre están a la vanguardia gracias a una preocupación constante en mantener actualizada a la comunidad estudiantil, sin perjuicio de lo que nos compete en el respeto de nuestros orígenes, lo cual vuelve la mirada hacia lo histórico que se encuentra indisolublemente asociado al sistema Civil del Derecho.
Hoy es una buena oportunidad para iniciar o conocer más sobre el mundo del Derecho y además reconocer el trabajo que por siglos ha realizado una profesión que se mantiene vigente, que es pilar de la sociedad y la base del orden y la justicia a nivel mundial.
